La Sima del Diablo es un barranco que tiene agua todo el año. Son varios sus rápeles y destaca el que da nombre al barranco: un rápel con el que atravesamos una gran cascada. Es un barranco de un nivel bajo, muy divertido, con los accesos y el retorno muy cortos. Esta actividad se puede culminar con la visita al pintoresco pueblo azul de los pitufos en Júzcar.